Hola!!
Mira... no he vivido al 100% tu situación, pero puedo comprender parte de lo que sientes por varios motivos...
Respecto a lo de la edad... 30 años, no son añazos... sino añitos en una carrera como medicina. Medicina es una carrera que la acabas, a lo más temprano, con 24 años. Teniendo en cuenta que cada año hay gente que entra con la prueba de mayores de 25 años, mínimo la acaban con 31-32 años... es decir, todavía eres muy joven, más que ellos. Y por poner un ejemplo, en mi servicio (que somos un residente por año), tan sólo 1 residente tiene la edad que le tocaría por ir todo a curso por año, así que... no, no eres mayor
Por otro lado, lo que dices respecto a elegir plaza o no.. depende de lo que te guste. Ten por seguro que plaza tendrás... otra cosa es de qué especialidad quieres. Te quedan 35-40 años para jubilarte, 35-40 años para ejercer la profesión que más te gusta (de residente, aunque no con toda la responsabilidad, ya ejerces...). Con esto quiero decir que merece la pena poner toda la leña al fuego para intentar, con todas tus fuerzas, estar donde siempre quisiste estar. Si luego la nota no lo permitió, al menos estar orgulloso porque estás donde has podido llegar. Pero elegir plaza sin haberlo intentado todo, y conformarte con algo que no te gusta sólo por pereza de pensar en perder un año... a mi parecer, no merece la pena.
Te explico lo que me ocurrió a mí: compramos un piso sobre plano, junto a mi pareja, cuando estudiaba 4º... y la entrega de llaves era justo cuando me licenciara (y así fue). Desde 2º, yo ya estaba trabajando a la vez que estudiando... conseguí sacarme todo a curso por año, y cuando me planteé empezar a preparar el MIR en 6º no pude por falta de tiempo (ya tenía suficiente con trabajar, estudiar y algo de vida personal... necesitaba el dinero). Entonces, cuando me licencié, decidí ponerme a trabajar como médico... ganaba 4 veces más que con el anterior trabajo. Y también me quitó tiempo de estudio para el examen MIR... de hecho, dejé CTO.
Siempre me había gustado la medicina de familia por lo que me apunté al MIR sin presión, sabiendo que plaza la tendría... pero no estudié y un mes antes del examen falleció mi padre, lo que impidió que, aunque lo hubiera preparado, fuese con todas mis posibilidades. Fui a Madrid, elegí mi plaza de familia en el hospital que quise y empecé la residencia, feliz

Pero al cabo de unos meses me di cuenta que había algo que siempre había ido más conmigo, y pensé fríamente... y pensé que si hubiera quedado el número 1 no hubiera cogido familia, sino COT... así que dejé la residencia e hice de nuevo el examen MIR sin más preparación que el estudio que hacía diariamente durante mi residencia de familia. Hoy, con mucha suerte, he conseguido ser R1 de COT y soy mucho más feliz

Eso sí; si no hubiera tenido la suerte que tuve el año pasado, después de los nervios que pasé durante mucho tiempo deseando esta plaza... este año me hubiera dedicado exclusivamente a preparar el MIR (mis condiciones personales me lo permitían, ahorrando lo que tenía ahorrado), y hubiera elegido la plaza que hubiera podido después de haberlo dado todo... 40 años en una profesión son muchos como para dejarlo escapar por unos meses de estudio... y aunque hoy hubiese sido más fácil ser R2 de familia y pensar que me quedan 2,5 años para ser adjunto y vivir mejor, pienso que cuando tenga 35 años miraré atrás y seré más feliz por ser traumatólogo
Qué quiero decir con todo este rollo? Que si finalmente me hubiera conformado con la medicina de familia (que me encanta... sobre 10, me gusta 9,5) porque no tuve tiempo de preparar el MIR entre el trabajo antiguo y el fallecimiento de mi padre... a la larga me hubiera arrepentido de no ser traumatólogo... y hoy me enorgullezco todavía un poquito más (trauma es un 10 sobre 10, para mí).
Así que te animo para que pongas todo lo que puedes dar para conseguir la plaza que quieras. Si no llegas, que no sea porque no pudiste prepararlo... merece la pena, en serio
P.D: quizás en algún momento parezca que infravaloro la familia, pero nada más lejos de la realidad, ni mucho menos!!!!! Durante la carrera siempre me encantó familia por tener conocimientos en todos los ámbitos de la medicina y poder aplicarlos de forma cercana con la gente... y también trauma, ya que he estado muy muy metido en el mundo del deporte y era una forma de mezclar mis preferencias quirúrgicas y esa vida de deporte... Siempre me he movido entre ambas especialidades, es decir, que siempre he sido un defensor a muerte de familia ante todos los que la han considerado inferior! Que conste en acta...
