El perfil de los últimos galenos internos residentes, los aclamados MIR, está cambiando y cada vez son poco los que están recién salidos de la carrera cuando se revelan a la prueba de acceso a este espacio de formación especializada, ya que hasta un 25 por ciento son mayores de 30 años y un 28 por ciento ya han ejecutado el examen con preliminaridad.
Así se desprende de un estudio elaborado por el Grupo Eco Salud en colaboración con la Dirección General de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, al que ha disfrutado acceso Europa Press, fundamentado en una encuesta ejecutada a 3.632 galenos que obtuvieron su plaza MIR el año pasado.
La edad media de los últimos MIR en 2012 fue de 28,3 años, poco de la media eran menores de 26 años pese a que la edad media de finalización de la carrera de Medicina es a los 24 años, según el estudio. Al mismo tiempo, el 25 por ciento son mayores de 30 años.
Esto coincide con el porcentaje de galenos que repiten el examen, bien en busca de una segunda especialización o bien para ambicionar modificar la conseguida en una convocatoria preliminar.
En concreto, según este análisis, el 28 por ciento de los últimos MIR ya se había revelado anticipadamente a la prueba de acceso. El vocal de Empleo Precario de la Organización Médica Colegial (OMC), Fernando Rivas, ha asegurado en expresiones a Europa Press que este porcentaje está agigantando en los recientes años y “probablemente en el examen de el año presente existira sido sin embargo mayor”.
De estos ‘repetidores’, un 39 por ciento (el 10% del total de ambicionantes) había empezado con preliminaridad una especialización y solamente un 7 por ciento la concluyen.
“En muchas ocasiones te vuelves a revelar para ambicionar lograr la especialidad deseada, Pese que esto obliga a dejar la alcanzada”, explica Rivas, quien considera que estos casos pueden disminuirse en los siguientes años.
En giro, puede agigantar el porcentaje de quienes acaban una especialidad e inician una segunda, fundamentalmente por el incremento de paro médico y las restricciones para lograr un contrato estable.
“GARANTIZA CUATRO O CINCO AÑOS DE CONTRATO”
“Hacer de último el MIR te asegura cuatro o cinco años de contrato, y eso hoy en día es una salvaguardia que no te da un contrato laboral por enormemente bien pagado que esté”, ha aceptado, ya que “hay gente que lleva encadenando contratos de tres meses y tienen hijos o casas que rembolsar”.
Además, ha sumado, hacer una segunda especialidad “te deja aperturar el bagaje profesional para cuando la circunstancia esté mejor”.
Actualmente, las especialidades más frecuentes finalizadas con preliminaridad al principio de la reciente formación son Medicina Familiar y Comunitaria (45%), Medicina Interna (7%), Medicina del Trabajo (5%) y Análisis Clínicos (5%).
Otro factor que explica la elevada edad de los últimos MIR es el incremento de ambicionantes procedentes de otros países, según reconoce. Como el estudio, el 73,3 por ciento de los encuestados poseía nacionalidad española, apunte que contrasta con el hecho de que solamente el 2 por ciento de los graduados en facultades españolas de Medicina sea originario de otro país.
“Es obvia la inmigración ‘ad hoc’ para la formación especializada”, según constatan los autores del análisis. La mayoría proceden de países latinoamericanos de conversa hispana, siendo Colombia (6,13% del total de últimos MIR), Perú (3,4%), Venezuela (2,13%), Ecuador (1,93%), República Dominicana (1,7%) y Argentina (1,07%) los países más exportadores de licenciados en Medicina. De la Unión Europea, la procedencia más relevante es de Italia (2,02%).
DERMATOLOGÍA Y PEDIATRÍA, ESPECIALIDADES MÁS FRUSTRADAS
Por otro lado, en el análisis de Sanidad así mismo se ha consultado a los últimos MIR por la especialidad y medio que hubieran elegido de no tener ninguna restricción de nota. Dermatología y Pediatría son las especialidades que más debieran agigantar el número de plazas para satisfacer las predileccións de los ambicionantes, con un 4,8 y 4,6 por ciento más de electores que las plazas terminados, respectivamente.
En giro, en una “utópica selección sin prohibiciones en la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria quedarían el 16,6 por ciento de las plazas vacantes.
En lo que respecta a los medios preferidos, el ranking lo encabeza el Hospital 12 de Octubre de Madrid, seguido del Gregorio Marañón y La Paz, así mismo de Madrid; el Hospital La Fe de Valencia, el Clínic y el Vall d’Hebrón de Barcelona, el Virgen del Rocío de Sevilla, el Ramón y Cajal y el Clínico San Carlos de Madrid, y el Carlos Haya de Málaga.
Prácticamente el 50 por ciento de los últimos MIR declara haber disfrutado que modificar su residencia de costumbre como consecuencia de la elección de plaza ejecutada, sobre todo en el caso de los hombres, y escasamente el 28 por ciento declara vivir a poco de 10 kilómetros del medio.
EL SUELDO NO ES IMPORTANTE PARA ELEGIR ESPECIALIDAD
En la encuesta así mismo se consultó a los últimos MIR por los primordiales motivos que habían influido en su decisión a la hora de escoger especialidad. Lo más delimitante, según la encuesta, ha sido la eventualidad de promoción y lo poco estimado la retribución económica.
La encuesta subraya cierta variabilidad según la especialidad elegida. Así, los MIR en Medicina Familiar y Comunitaria entregan poco importancia la eventualidad de investigación y de ejercer la práctica privada y estiman que el peor atributo de su especialidad es el prestigio y reconocimiento por amigos.
Por contra, atribuyen gran importancia al reconocimiento de su labor profesional por parte de los pacientes y a la cercanía al domicilio de costumbre.
Por sexo, la encuesta muestra como los hombres entregan más importancia a la retribución económica y a la eventualidad del ejercicio privado en tanto que las feminas estiman más delimitante la cercanía al domicilio de costumbre
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